5 de julio de 2008

Somos de colores



Todos tenemos un color. No se trata de un color favorito, sino del color que emanamos, nosotros mismos, sin saberlo ni quererlo, nuestro color. Hay gente amarilla, otros que son blancos, los hay verdes y naranjas, e incluso, los más afortunados, que son jaspeados, con motitas de otros tonos.

Mrs Rexi, por ejemplo, es verde hierba. Fresquita. Balanceándose al sol, brillante. Intensa. Con olor rico a manzana ácida. Si la miras mucho, te apacigua, te calma. Y te salvas. Como cuando gritabas "casa" jugando al escondite de chico. Es verde como los paisajes más lindos, como una montaña de Escocia; como los paraísos de Björk en Joga, su mejor canción; como el chicle de menta, como los chupachups de manzana. Como el relleno de los After Eight que tanto le gustan. Cuando la agita el viento, el verde se entremezcla revoltoso con otras tonalidades, azul, amarillo, marrón, negro, blanco, formando una especie de torbellino en la paleta de colores. Otras, cuando el sol le atiza demasiado fuerte, le amarillean una chispita las puntas, pero siempre consigue rebrotar con fuerza, Una y otra vez. Verde que te quiero verde. Como el poeta. Como mi tierra




A es lila. Morada. Como las ciruelas, con la piel prieta, como de duras, aunque luego las muerdes y son blanditas, dulces, super refrescantes. Púrpura, como su pulpa. Es lila, una palabra preciosa li-la-li-la. Lila dit ça. Lila como los anocheceres veraniegos. Como un buen tinto, con cuerpo y carácter. Como el color de la lucha. Hasta la victoria siempre. Como el color de la mujer, de la esencia femenina. La fuerza y la flaqueza, ambas son lilas. Como las moras, de chuches, y las que se cuelan salvajes en alguna ensalada. Como la luna triste, cuando la quieren tapar las nubes y entonces se arropa y llora. Lila como las campanillas, silvestres, dulces, risueñas.



S, en cambio, es blanca. El color de la alegría en muchas culturas, y también del dolor en otras tantas, y el de la tristeza. Es la pureza, la serenidad. Es la palabra. Es la bondad. Es el color de las cosas especiales, de la tranquilidad. De la paz. Es el recuerdo de las sábanas acabadas de cambiar, en verano, con ese olor rico a limpio; fresquitas; como un bálsamo después de días intensos de playa y juegos y más juegos. El blanco es el momento de ebullición creativa, cuando tienes una página en blanco, la antesala de un cuento, de un post, de una salvación. Las fotos en blanco y negro. Las rosas blancas, las margaritas blancas, las orquídeas -jaspeadas de un poquito de rojo- blancas. La luz, esencial, es blanca, como las estrellas. Como la intensidad



R es naranja. Como las puestas y las salidas de sol. Como el popeye de naranja, simple, rico y que quita la sed. Como el color de los monjes budistas, todo meditación. Es también el color de la acción, de la creatividad, de la tierra. ¡Los superhéroes tendrían que llevar trajes naranjas! Por qué será que a los de la Marvel no se les ha ocurrido? R es naranja intenso, como naranjito, en los mundiales de fútbol del 82, aunque a veces le flaquean las fuerzas y se apaga un poquito y se queda naranja calabaza, pequeñito, pequeñito, como un garbancito.



Yo, por ejemplo, tengo claro que soy rojo piruleta. Efervescente. Que pica un poco. Intenso. A veces, demasiado. Profundo. A veces, rota

2 comentarios:

Anónimo dijo...

C es azul, como el mar, a veces transparente, a veces oscura. Tiene todos los tonos: añil, cielo, klein, marino. En ocasiones se le escapa algo de verde, como sus ojos, siempre alegres aunque diga que tiene ojeras. Ojos vivos, curiosos, atentos, cuidadosos. Ojos que ríen, como con chispitas, ojos que lloran de tristeza, de alegría y de risa.
C es azul cristalino, trata de esconderse, pero ella misma es como un espejo.
A C le gusta el rojo, sin embargo. El rojo apasionado, que estalla. El rojo de su lámpara, de sus vestidos, de sus zapatitos, como los de Dorothy, con lo que le gusta soñar que se escapa. El rojo sandía, el rojo cereza, el rojo tomate, el rojo gazpacho-de-los-mediodías-de-verano. Rojo.

Anónimo dijo...

Es verdad! Estoy de acuerdo... C es azul (mi color favorito). Es el primer color que me vino a la mente... :))))

S.